Un vuelco se registró en las últimas horas en el caso del homicidio de un militar en Punta Arenas. El acusado por el caso, quien fue formalizado y enviado a prisión preventiva quedó en libertad tras determinarse que nunca estuvo en el local donde ocurrió el crimen.

El acusado es un joven colombiano de 20 años, quien fue detenido como sospechoso por este caso en el Hospital Regional, donde llegó con un dedo cortado, sus ropas con sangre y una lesión en su rostro, pero que sería a causa de otro hecho.

“Se produjo una situación de riesgo contra una persona inocente. En la audiencia se planteó que él estaba en un local distinto, y muy distante del local de los hechos, a la misma hora que se le atribuía el ser autor de este homicidio”, recordó el defensor, Pablo Santander al diario El Pingüino.

Tras una revisión de las cámaras de seguridad se determinó que el joven extranjero nunca compartió con el soldado muerto, ni siquiera estuvo en el mismo lugar donde este perdió la vida.

“Se pidieron las cámaras de seguridad y se logra establecer que mi cliente sí ingresó a (otra) discoteca, a las 02:45 horas, permaneciendo en las inmediaciones hasta las 05:00 horas”, relató el abogado.

“Se produjo una situación de riesgo contra una persona inocente que pidió asistencia porque se provocó una herida, un corte en su dedo con una ampolleta, y al acudir al Hospital Regional de Punta Arenas fue tomado como sospechoso en la autoría de un delito de homicidio”, lamentó.

Tras la nueva audiencia, el joven recuperó su libertad pasadas las 17:00 horas del jueves.A su salida de la cárcel fue recibido por familiares y amigos.